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Mortero ignífugo Perlifoc con base de yeso, de color blanco. Mortero con propiedades ignífugas y de aislamiento térmico para la protección pasiva contra incendios en estructuras metálicas y forjados mixtos. Mortero intumescente de densidad baja y alto rendimiento. Hasta 240 minutos. 1 palet -> 56 sacos de 20 kg
El mortero para ignifugados Perlifoc tiene grandes ventajas con respecto a sus competidores:
Ha sido ensayado sobre materiales como el metal según EN 13381-4, hormigón según EN 13381-3, estructuras Mixtas según EN 13381-5, Madera según EN 1363-1, forjados, conductos de ventilación, tabiques, divisiones, falsos techos o franjas cortafuegos.
Base: Yeso
Color: Blanco
Densidad aparente: 600-760 kg/m3
Valor pH: 12
Rendimiento teórico*: 8,5 kg/m2/cm
Condiciones de aplicación:Temperatura mortero, Temperatura sustrato, Temperatura ambiente entre 3°C y 38 °C Entre 3°C y 52 °C Entre 3°C y 43 °C respectivamente.
Reacción al Fuego: A1
Asbestos: Libre de asbestos
Conductividad Térmica: 0,122 W/mK
Presentación: Sacos de 20 kg. 56 sacos/palet
Aplicación: El mortero Perlifoc se aplica húmedo por máquina de proyección o a mano en pequeñas zonas. para la reparación de golpes.
En el mercado de los morteros ignífugos existe una amplia variedad de opciones, una de ellas es el mortero ignífugo Perlifoc. Este tipo de mortero se caracteriza por su alta resistencia al fuego y su capacidad para ofrecer protección pasiva contra incendios.
Otro tipo de mortero ignífugo disponible en el mercado es el mortero ignífugo Perlifoc HP como referente en el sector de la construcción y protección pasiva contra incendios. Este tipo de mortero destaca por su capacidad de aislamiento térmico y acústico, así como por brindar protección pasiva contra incendios. El mortero ignífugo Perlifoc HP es una opción confiable para proteger estructuras y mejorar la seguridad de las construcciones con una resistencia de 240 minutos en una sola capa.
El mortero ignífugo tiene una amplia gama de aplicaciones en estructuras y construcciones. Se utiliza para brindar protección contra incendios en elementos como vigas, columnas, losas y muros, franjas, divisiones verticales, conductos de ventilación, etc. Su capacidad para resistir altas temperaturas y mantener la integridad estructural durante un incendio lo convierte en una solución efectiva para fortalecer la seguridad de los edificios.
El mortero ignífugo no solo proporciona protección contra incendios, sino que también ofrece un excelente aislamiento térmico y acústico. Su aplicación en paredes y techos reduce la transferencia de calor y ruido, mejorando así el confort interior de los espacios habitables. Esta propiedad lo convierte en una elección ideal para edificios residenciales y comerciales.
Además del mortero ignífugo, podemos optar por la protección contra incendios mediante pintura intumescente. Esta pintura se expande y forma una capa aislante cuando se expone a la radiación del fuego, retardando su propagación. La combinación de mortero ignífugo y pinturas intumescentes ofrece una doble capa de protección pasiva contra incendios, aumentando así la seguridad de las estructuras.
Antes de aplicar el mortero ignífugo, es fundamental preparar adecuadamente la superficie. Asegúrese de que esté completamente seca, limpia y libre de polvo, grasa o pintura en mal estado. Si desea aplicar el mortero en perfiles de madera, se recomienda colocar una malla metálica para evitar desprendimientos posteriores.
La aplicación del mortero ignífugo se puede realizar de dos formas principales: mediante proyección o de forma manual en zonas pequeñas o para la reparación de golpes. La proyección del mortero se realiza utilizando una máquina específica para este fin, que permite una distribución uniforme y rápida sobre la superficie a proteger. Por otro lado, la aplicación manual es útil cuando se requiere mayor precisión o en áreas de difícil acceso.
En caso de haber sufrido golpes o daños en el mortero ignífugo, es posible realizar reparaciones. Para corregir golpes, es necesario retirar la zona dañada hasta llegar a una capa de mortero firme y limpio. Luego, se debe volver a aplicar una nueva capa de mortero ignífugo sobre la zona afectada, siguiendo el mismo método de aplicación utilizado inicialmente. Es importante asegurarse de que la nueva capa de mortero se integre de manera adecuada con la capa existente para asegurar su máxima protección contra incendios.
Para garantizar la efectividad del mortero ignífugo, es fundamental mantener la estructura completamente seca y limpia. La presencia de humedad o suciedad en la superficie puede comprometer la adherencia del mortero y reducir su capacidad de resistencia al fuego.
En zonas donde se puedan ocasionar vibraciones o daños mecánicos, se recomienda reforzar el mortero ignífugo con una malla metálica. Esta malla proporciona mayor resistencia y evita posibles desprendimientos del mortero en caso de impactos u otros eventos que puedan dañar la estructura protegida.
Si se desea cambiar o mejorar la apariencia del mortero ignífugo, es posible aplicar pinturas convencionales sobre él una vez se haya secado por completo. Estas pinturas permiten personalizar el aspecto visual del revestimiento sin afectar su capacidad de protección pasiva contra incendios. Es importante utilizar pinturas adecuadas y seguir las recomendaciones del fabricante para obtener los mejores resultados.